Segoviana y Nastic firmaron un empate que culminó con el descenso matemático de los segovianos, y asegura la presencia de los tarraconenses en la fase de ascenso a la Liga Hypermotion al tener ganado el goal average particular con el Celta Fortuna.
La primera mitad que se vivió en La Albuera fue un auténtico contraste de emociones, en un partido sin red de seguridad para Segoviana y Nastic, aunque con objetivos totalmente contrapuestos en la clasificación.
El inicio del partido dejó patente que los locales salieron algo tensos, dio la sensación de que les pudo la presión de tener que ganar sí o sí para mantener las opciones de salvar la categoría. El Nastic supo jugar con eso de manera precisa, y en el minuto 9 de jugo pusieron tierra de por medio en una jugada bastante gris que el colegiado no estimó como falta de Marc Fernández sobre Sergi Molina. El atacante puso en bandeja el gol sobre Antoñín, que marcó a placer.
Las protestas en la grada y por parte de los jugadores locales fueron evidentes, pero la decisión del colegiado ya era inamovible. Con el golpe encajado, en el minuto 13 llegó otro croché de los catalanes, en esta ocasión en una rápida contra de Antoñín, que era culminada por Viti a puerta vacía. A la Sego se le estaba poniendo cara de segunda federación. Pero los de Ramsés Gil se revolvieron con carácter, como si fuesen un león herido, y emergieron de las cenizas. En el 17 acortaba distancias Rubén Yubero en un córner botado por Fer Llorente, en el talón de Aquiles del Nastic en la primera mitad.
Tras acortarse la distancia en el marcador, el Nastic busco emerger de nuevo, intentando salir de la presión asfixiante de los segovianos. Lo hacían mediante balones cruzados a la espalda de la defensa y en otras ocasiones filtrando entre líneas, pero los segovianos se mantenían bastante firmes en defensa.
En una de esas presiones locales, Fernán estuvo a punto de pescar en río revuelto. El medio no se lo pensó desde la frontal y soltó un disparo que se fue a córner tras tocar Rebollo.
Los verdes ofensivamente ya no eran un equipo preciso, y para que llegase otra ocasión hubo que esperar hasta el minuto 30, cuando Antoñín probó suerte en un centro chut que fue despejado por Oliva.
El partido iba a entrar de nuevo ebullición, lo hizo en el 39. La Sego volvió a sacar petróleo del balón parado en un nuevo córner. Fer Llorente ponía el balón sobre el primer palo y Abel Pascual remataba de cabeza a placer, dejando de nuevo en evidencia a los tarraconenses, y con el que se iba al descanso, con todo por decidir en los segundos cuarenta y cinco minutos.
Tras el tiempo de descanso, el partido se encaró por parte de ambos equipos de manera mucho más pausada, sobre todo por parte del Nastic, que supo contemporizar mucho mejor el juego y evitar que la Segoviana cargase con peligro como en algunas fases del primer tiempo. Montalvo en el medio del campo contribuyó a que eso fuese así.
Pese a este ritmo, en el minuto 57 los locales volvieron a rozar el gol. Un polémico robo, como en el primer tanto visitante, dio la opción a Gómez en un disparo que no encontró la gloria.
El Nastic se iba a ver con un contratiempo en el minuto 59. Joan Oriol se lesionaba y tenía que entrar en su lugar Junca. Los minutos iban pasando sin noticias en ambas áreas, lo que no era beneficioso para los azulgranas, que necesitaban el tanto de la victoria como agua de mayo.
El desgaste físico se fue evidenciando con el paso de los minutos, y comenzaron a abrirse mayores espacios en la zona central del terreno de juego. Pero no fue hasta los diez últimos minutos cuando se jugó al todo o nada.
El primero en abrir el melón fue Antoñín en un remate de cabeza que no encontró portería. Nuevamente el delantero ponía prueba a Oliva en el minuto 86. El Nastic estaba rozando el gol cada vez más. Concha envió al limbo una contra con un remate a las nubes y Roberto Torres tuvo el gol de la victoria con un remate al palo.
La Sego cogió oxígeno y vida, y en la prolongación tuvo dos opciones que no llegaron a buen puerto, en un remate de Farrell y, posteriormente, en una ocasión de Hugo Díaz, que se fue fuera y que pudo haber supuesto otro gol de oro del medio al filo del pitido final como en Sestao, pero en esta ocasión se deshizo como un azucarillo y dio con la Segoviana en un descenso con el que ha estado jugando toda la segunda vuelta, y que tuvo como talón de Aquiles la crisis de juego y resultados que tuvo logrando uno de veinticuatro puntos tras el parón navideño.
FICHA TÉCNICA:
Gimnástica Segoviana: Oliva, Sergi Molina, Abel Pascual, Manu (77’, Tellechea), Berlanga (74’, Céspedes), Gómez (86’, Maroto), Javi Borrego, Fer Llorente, Rubén Yubero, Farrell y Fernán (74’ Hugo Díaz).
Gimnàstic de Tarragona: Rebollo, Paul, Dufur (90’, Leal), Montalvo, Antoñín, Marc Fernández (63’, Jiménez), Óscar Sanz, Pablo Fernández, Torres, Joan Oriol (61’, Junca) y Víctor Navarro (63’, Concha).
Goles: 9’ (0-1) Antoñín; 13 (0-2) Víctor Narro; 16’ (1-2) Rubén Yubero; 39’ (2-2) Abel Pascual
Colegiado: Manrique Antequera (Colegio Andaluz)
Amonestaciones: Mostró tarjeta amarilla a los jugadores locales Sergi Molina, Manu y Borrego; y en el equipo visitante a Pol Domingo, Dufur, Óscar Sanz y Torres.
En el minuto 89 vio la segunda amarilla Borrego, siendo expulsado por doble amonestación.
Campo: La Albuera (3.301 espectadores) El Nastic contó con la presencia de algo más de un centenar de seguidores que se desplazaron a Segovia.
Crónica: Jorge Gómez
