El secretario general del PSOE de Segovia, José Luis Aceves, ha comparecido ante los medios de comunicación en un desayuno informativo en la sede, en el que ha participado el secretario general del PSOE de Castilla y León, Luis Tudanca, quien ha anunciado que el Grupo Socialista registrará en las Cortes la petición para que se actualicen las normas del Plan de Emergencias de Castilla y León ante inundaciones.
Se trata, según ha explicado Tudanca en un desayuno informativo del PSOE de Segovia, de adaptar la norma a la nueva legislación en materia de protección civil y para mejorar también la coordinación y los medios a disposición de los ayuntamientos y de las diputaciones cuando suceden este tipo de episodios.
Tudanca ha recordado que es una petición reiterada del PSOE de hace muchos años para que se actualicen todas las normas en materia de protección civil, de gestión de emergencias, de protección frente al cambio climático, incluso, con fondos específicos para atender estas urgencias y que han tenido el voto en contra de Vox.
En todo caso, ha pedido responsabilidad y coordinación a la Junta de Castilla y León y a los responsables del PP en Segovia en todas sus instituciones. “Lo que ha pasado no es culpa de nadie”, ha remarcado, para afear a la Junta que tenga la tentación de no pedir ayuda al Gobierno por su “necedad e incapacidad”.
Además, se ha preguntado si el PP en realidad quiere gobernar porque “cada vez que pasa algo le echan la culpa a la oposición”. “Si quiere gobernar en la Junta de Castilla y León, donde cada vez que pasa algo le echan la culpa al Gobierno, o si en realidad el problema no es que no asuman sus competencias, sino que no podemos asumir más incompetencia”, ha concluido.
Por otra parte, Aceves ha recordado que es la Junta de Castilla y León, según la Ley 17/2015, de Protección Civil del Estado, tiene las competencias a la hora de poner en marcha políticas de previsión, prevención y control de los riesgos ante desastres naturales. Es la encargada, en este caso, de «elaborar, aprobar, implantar y mantener un conjunto de instrumentos de planificación y gestión necesario para desarrollar las medidas aplicables, así como los criterios para la movilización de los recursos que se consideren necesarios ante las situaciones de emergencias».
Asimismo, según el INUNcyl o Plan de Inundaciones de Castilla y León, corresponde a la Junta «notificar a las autoridades competentes la parición de sucesos que puedan producir daños a las personas, medioambiente y los bienes y decidir y ordenar la aplicación de medidas de protección a la población y otras actuaciones que se deban llevar a cabo en cada una de las zonas afectadas».
Por tal razón, «es irresponsable que el PP intente descargar la culpa en la Confederación Hidrográfica del Duero, cuando la máxima competente de desarrollar y planificar las actuaciones ante las recientes inundaciones ocurridas en Segovia la semana pasada es la Junta de Castilla y León, gobernada por el PP y la ultraderecha. Exigimos disculpas y que dejen de engañar a la opinión pública con cortinas de humo para desviar la atención de su nula gestión y falta de previsión».
Por otra parte, los representantes del PP en la Diputación de Segovia, «en otro intento de no asumir sus responsabilidades y quitarse de encima el peso de la culpa», tienen la intención de pedir al Gobierno de España la declaración de zona catastrófica en los lugares afectados. Pero para que una comarca sea declarada zona afectada gravemente por emergencias de protección civil (ZAEPC), como se conoce técnicamente, el paso previo, que es requisito indispensable, es que quien tiene las competencias en materia de protección civil, es decir la Junta de Castilla y León, tiene que declarar el plan de emergencias nivel 2, cosa que no ha hecho.
Así las cosas, para que el Gobierno de España pueda intervenir, es la Junta la que tiene que declarar previamente el nivel 2 de emergencias, como condición indispensable. Para Aceves es «una prueba más de la improvisación y la falta de planificación la que nos tiene acostumbrados el PP, independientemente de la institución que dirija. ¿El problema de todo esto? Que acaban pagando las consecuencias de su nula gestión los de siempre: los ciudadanos. A esto se suma el hecho de que son incapaces de asumir sus errores y acaban echando las culpas a todos los demás».
