El director general de Industria de la Junta de Castilla y León, Jesús Jiménez, prevé aprobar el Plan Territorial de Fomento (PTF) de Segovia a principios de 2025, una vez que disponga a finales de junio del informe definitivo elaborado por la Unión General de Trabajadores (UGT) y la Federación Empresarial Segoviana (Fes). Tras contar con ese documento, los técnicos de la Consejería de Industria, Comercio y Empleo tendrán que evaluarlo y será compartido con el resto de las consejerías implicadas en el Plan. Unos plazos que la patronal desearía que se acortaran para contar con el Plan a finales del presente ejercicio.
Tras una reunión mantenida en Arroyo de la Encomienda (Valladolid) entre responsables de la Consejería y representantes de la patronal y el sindicato para analizar el estado de los trabajos previos al plan, Jiménez apuntó que los deseos del presidente de Fes, Andrés Ortega, son «muy loables», pero recordó que el funcionamiento de la administración lleva sus plazos. «Intentaremos agilizarlos al máximo pero las tramitaciones nos obligan a cumplir con una serie de hitos administrativos», aseveró.
El estudio elaborado por la patronal incluye una serie de puntos como la evaluación, de forma objetiva, de la situación actual para saber «dónde está la provincia y a dónde quiere ir»; detectar las oportunidades ligadas a las características diferenciales de Segovia, por su cercanía a Madrid y Segovia, sin olvidar los recursos naturales, el talento, los sectores productivos relevantes y con mayor potenciales; identificar y corregir desequilibrios para impulsar una promoción económica homogénea en la provincia; fomentar la modernización del tejido productivo; la llegada de nuevas inversiones; el desarrollo de las cadenas de valor sectoriales, que contribuirán al posicionamiento de nuevos sectores productivos; la apuesta por la innovación y el desarrollo (I+D), al ser palancas para impulsar todos los sectores de actividad económica; definir un modelo para la atracción y retención del talento; contar con un modelo de financiación e incentivos para llevar a cabo el plan; definir un modelo cooperativo, con la colaboración institucional y, por último, desarrollar una acción continua de comunicación a la sociedad civil.