El Grupo Municipal VOX en Ayuntamiento de Segovia ha registrado una moción en la cual instan al Gobierno Municipal a llevar a cabo las medidas necesarias “para evitar las crecidas del arroyo Clamores y los peligros de las mismas”. Estas, según explican, vienen originadas por el crecimiento urbanístico de Segovia, que según un estudio que se realizo en el 2003, “ha aumentado la impermeabilidad” del terreno, que conlleva que el agua de la lluvia va directamente al alcantarillado, lo que implica que el colector de Clamores, en algunas ocasiones, soporte un gran caudal de agua.
En la moción, Esther Núñez, portavoz de VOX en el Ayuntamiento de Segovia solicita que se promueva y facilite “la cooperación entre el Ayuntamiento de Segovia y el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana” para que se desarrolle “un plan de acción coordinado que aborde la restauración y conservación de la bóveda del río Clamores”. Además, piden que se destinen todos los “recursos necesarios”, para realizar “un diagnostico exhaustivo del estado de la bóveda y elaborar un proyecto de restauración que incluya las medidas necesarias para su conservación”.
Para llevar a cabo este proyecto, Núñez considera necesario “establecer una calendario de actuaciones” priorizando las que sean más necesarias y “que permitan iniciar cuanto antes los trabajos de restauración, minimizando el riesgo de daños mayores y garantizando la seguridad de la infraestructura y de los ciudadanos”, desde VOX creen que es adecuado que en este proyecto participen “expertos en patrimonio histórico, ingeniería civil y otras disciplinas relevantes para asegurar que las intervenciones realizadas en la bóveda del Clamores respeten su valor histórico y arquitectónico”.
La formación, solicita que tanto el Ayuntamiento de Segovia como la ciudanía estén “informados periódicamente” sobre “el progreso de las actuaciones y los resultados obtenidos, asegurando así la transparencia y la implicación de la comunidad en la preservación de su patrimonio”.
Para finalizar, en la moción plantean que “en caso de que no se logre una solución satisfactoria para la restauración de la bóveda del Clamores”, se estudie y se promueva “la construcción de un tanque de tormentas en la zona de Nueva Segovia” con el objetivo “de gestionar el exceso de agua durante lluvias torrenciales y prevenir inundaciones en la ciudad”.
