El despilfarro y las decisiones caprichosas e improvisadas, adoptadas al margen de la opinión de los técnicos, vuelven a marcar la gestión de la Navidad por parte del alcalde Mazarías y su equipo de Gobierno. Las adjudicaciones “a dedo”, las ocurrencias y el gasto desorbitado siguen presentes en la gestión de la Navidad en Segovia, donde, como estamos comprobando, los populares vuelven a cometer los mismos errores del pasado, advertidos de forma reiterada por el grupo municipal del PSOE.
El grupo municipal del PSOE se ha visto en la obligación de presentar un recurso de reposición ante un decreto firmado por el alcalde Mazarías donde autoriza la circulación de un “tren turístico navideño”. Se trata de un procedimiento que, a juicio de este grupo municipal, presenta claros visos de irregularidad, en tanto que el alcalde decreta un permiso de uso demanial del suelo sin información pública previa y en favor de la empresa adjudicataria del mercado navideño.
De hecho, el alcalde atiende la petición presentada por la empresa organizadora del mercado navideño en el argumento de que se trata de un servicio complementario a este mercadillo.
La realidad es que este servicio con indudable rentabilidad económica se adjudica “a dedo” pues no se ha producido un proceso previo de licitación por concurrencia competitiva y publicidad, por lo que se merman oportunidades a otras empresas de optar a la prestación de ambos servicios.
Solo puede haber un tren turístico navideño y, en ese sentido, tiene que estar licitado este servicio. Así lo recoge la jurisprudencia sobre casos similares y recientes, como el caso de un tren turístico en la ciudad de Ávila. Como hay una limitación en las zonas por donde se puede transitar, es obligatorio que exista una concurrencia pública o, al menos una publicidad, por si alguien más quisiera presentarse y, en su caso, acudir a un sorteo.
En esta sentencia del TSJ de Burgos, del año 2021, se dice que “no puede concederse a todo empresario/a que lo pida un tren turístico que discurra por la ciudad por unas calles prefijadas, pues evidentemente la regulación del tráfico no lo permite y por tanto hay una clara limitación en las licencias de uso común especial a autorizar, lo que hace que según la normativa tuviera que salir a licitación pública (como en años anteriores) y sea ilegal la adjudicación directa”.
“Las autorizaciones —señala la misma sentencia– se otorgarán directamente a los peticionarios que reúnan las condiciones requeridas, salvo si, por cualquier circunstancia, se encontrase limitado su número, en cuyo caso lo serán en régimen de concurrencia y si ello no fuera procedente, por no tener que valorarse condiciones especiales en los solicitantes, mediante sorteo, si otra cosa no se hubiese establecido en las condiciones por las que se rigen”.
Mazarías y su concejala de Turismo cometen los mismos errores que el año pasado, y que ya fueron puestos de manifiesto por los informes técnicos emitidos a raíz de la petición de revisión de oficio de los expedientes de la Navidad 2023-2024 presentada por el PSOE. Es evidente que —como ahora con el trenecito y el carrusel–, no se produjo un procedimiento de licitación por concurrencia competitiva, como marca la ley, lo que supondría una actuación de nulo derecho.
El año pasado el Ayuntamiento asumió gastos indebidos – que ahora “se podrán reclamar” al empresario, según los informes técnicos—y no se cobró ningún tributo al adjudicatario por permitir instalar y explotar económicamente los puestos del mercadillo en espacios como el Paseo del Salón y la calle Real.
Algo han aprendido y, en esta oportunidad, en el decreto sí se alude a que el Ayuntamiento tendrá que girar la correspondiente tasa de ocupación de vía pública a la empresa por la circulación de este trenecito por las calles de la ciudad.
Segovia gana cuando Mazarías hace caso al PSOE y así este año hemos visto como el alcalde ha tenido que rectificar y dar marcha atrás, descartando el Paseo del Salón para ubicar su ‘maravilloso’ Paseo de la Navidad. El mercadillo navideño ha regresado a la Plaza Mayor, emplazamiento que nunca debió abandonar. Sin embargo, Mazarías se ha empeñado en ubicar puestos en plena Calle Real, a escasos metros de edificios BIC como la Casa de la Lectura o la iglesia de San Martín, lugar donde el 2 de enero del año pasado, recordemos, ardió un puesto del mercado navideño –una churrería– causando dos heridos.
Por otra parte, el grupo municipal del PSOE ha solicitado acceso al informe emitido por el Interventor municipal que puso reparo al procedimiento de contratación del Pórtico de la Navidad a través de la adjudicación directa a una empresa. Ante la opinión de la Intervención Municipal —máximo garante del control y buen uso del dinero público de las arcas municipales— el alcalde opta por “levantar” ese reparo por decreto y ordenar que se continúe con el procedimiento.
Recordemos que el Gobierno municipal impulsó una modificación presupuestaria para disponer de 72.600 euros para afrontar el gasto de este Pórtico, cantidad que se suma a los más de 80.000 euros del contrato de iluminación navideña.
Llama la atención los argumentos que esgrime el alcalde Mazarías en su decreto para enmendar al Interventor Municipal. Afirma que el espectáculo ‘Pórtico de la Navidad” es “una obra conceptual de luz y sonido, responde al deseo de ofrecer algo verdaderamente original y único para estas fiestas”.
Mazarías asegura que esta “obra conceptual” no solo es un espectáculo de luz y sonido “sino una reflexión sobre cómo el arte digital y la tecnología pueden fusionarse con los cuentos navideños y el patrimonio histórico y cultural de la ciudad para crear una narrativa que hable tanto al presente como al futuro”. Para Mazarías, el ‘Pórtico de la Navidad’ es “un espectáculo total” y una “experiencia emocional” pues “no solo es una manifestación creativa con mensaje universal sobre las celebraciones navideñas sino también una celebración de la cultura segoviana”.
Con estos y otros argumentos, Mazarías justifica la asignación “a dedo” del alquiler de este Pórtico y enmienda la opinión del Interventor.
Como decimos, el PSOE ha solicitado el informe de Intervención donde, casi con seguridad, según sospechamos, el alto funcionario apuntará que debe contratarse a través de un procedimiento de licitación abierto con publicidad y no de forma directa a una empresa.
Por desgracia, esta práctica inadecuada es ya habitual en departamentos como la concejalía de Cultura que dirige el señor Juan Carlos Monroy. Como ya denuncio el PSOE en el último pleno el PP ejerce la hipocresía con mayúsculas, pues mientras presume de su modelo único de concurrencia competitiva al mismo tiempo no para de adjudicar por decenas actividades y servicios culturales sin contrato.
El propio Monroy, a preguntas de la oposición, reconoció 72 en lo que va de año, por importe superior a los 210.000 euros, si bien mucho nos tememos que al cerrar 2024 el número de actividades y servicios culturales adjudicados “a dedo” será bastante superior.
Por desgracia, Mazarías está blanqueando de forma permanente la incompetencia del señor Monroy, que no es capaz de contratar nada conforme a la legislación en vigor, de ahí los continuos reparos de Intervención a facturas y servicios sin contrato. El alcalde tiene que salir, también de forma continua, al rescate, con decretos que levantan los reparos de Intervención, lo que constituye una prueba más que evidente de la falta de control e improvisación constante que existe en la concejalía de Cultura.