Agradecido, muy agradecido, se mostraba el pregonero de este año Rubén García de Andrés, periodista, alcalde de Torrecaballeros y cofrade de la de la Esclavitud del Santo Cristo de la Cruz. Un pregonero querido y reconocido en el barrio, que siempre que el barrio lo demanda ofrece su ayuda y su hombro para arrimar.
El ambiente entrañable de este barrio segoviano, fieles a esas tradiciones que dan personalidad al barrio, como ese exquisito arroz con leche, la subida del mayo y el agradecimiento de un barrio a sus vecinos que año tras año se congregan en este día señalado de las fiestas de la Santa Cruz de Mayo.
Un emotivo pregón en el que García de Andrés fue recorriendo recuerdos familiares, y personajes con nombres propios, de los que construyen un barrio, y en el que quiso tener un “recuerdo emocionado a Don Domiciano”, ante el que arrancaban los aplausos de los ahí presentes.
La reivindicación también tuvo espacio en un pregón en el que el pregonero pidió que la mítica estación de tren “sea puesta en valor como merece”.
García de Andrés animó a que las fiestas no pierdan fuelle, a pesar de que las fiestas ya no sean como eran antaño, e invitó a los vecinos del barrio “a no dejar de tirar de un carro que es el de todos”, y pidió que sigan “construyendo barrio, construyendo vecindad”.
Un pregón en el que hubo espacio para apelar al orgullo de pertenencia: “Entre todos tejéis un barrio excepcional”, para cerrar con varios vivas a la Cruz de Mayo y al propio barrio.
