“Carlos, míranos desde arriba y cuídanos”
Querido Carlos, La verdad es que no sé ni como empezar a escribirte estas palabras. Creo que aún ni me he hecho a la idea de que ya no vas a estar. De que ya no voy a entrar en tu despacho a ver mil cosas acumuladas y a echar dos horas de charla divagando…
